No quiero que me digas que me quieres porque no me lo creo, ya sé que no me quieres porque no me lo dices. Tus silencios son reveladores, sobran las palabras. Para la próxima vez que quieras que me entere de que me quieres, calla y bésame.
En realidad el amor es así. Una contradicción. ¿Por qué demostrar el amor cuando ya amas y esperar que la otra persona haga lo mismo? Como tú bien dices en tu relato, "bésame". Los hechos son lo que valen, el resto es silencio.
Hola Su Quería invitarte a que pases por mi blog y leas la narración homenaje a todos los compañeros de anónima: http://azullavable.blogspot.com/2010/10/ejercitando-la-derrota.html Saludos
¡Y qué sea la última vez que no me quieres! ¡Qué ingratitud! Con lo bonitos que son los oyuelos que me salen cuando sonrío.
ResponderEliminar¿Qué pasó anoche, Su? Anda, calla y bésame! Me encanta, amor imperativo
ResponderEliminarPedazo declaración de amor!!!!! Aquí estoy, si quieres y te atreves ven. Es un puñetazo de sinceridad.
ResponderEliminarSaludillos!
Contradicción??... yo no veo más que coherencia. "Calla y bésame"... pues claro!!
ResponderEliminarMuy bueno, Su.
Besos de... miércoles.
Sobran las palabras
ResponderEliminarTienes toda la razón, en muchos casos un beso vale más que mil palabras.
ResponderEliminarSaludos
En realidad el amor es así. Una contradicción. ¿Por qué demostrar el amor cuando ya amas y esperar que la otra persona haga lo mismo? Como tú bien dices en tu relato, "bésame". Los hechos son lo que valen, el resto es silencio.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias. Si, al final vale más ser claros y directos que dar tanto rodeo.
ResponderEliminarBesos
Lo había leído en El Microrrelatista, allí lo comenté. Gran micro Su.
ResponderEliminarUn abrazo
Yo también lo había leído en el microrrelatista, muy buen micro, Su. Un abrazo.
ResponderEliminarDe como la lógica aristotélica engendra un beso!!
ResponderEliminarMuy bueno!!
El texto es buenísimo, no hay duda. La práctica de la teoría es algo más confusa para los hombres sinceros, me temo.
ResponderEliminarSaludos.
P.
Muchas gracias. Sí, la teoría es una cosa y la práctica, otra. Pero habrá que intentarlo ¿no?
ResponderEliminarAbrazos
Hola Su
ResponderEliminarQuería invitarte a que pases por mi blog y leas la narración homenaje a todos los compañeros de anónima: http://azullavable.blogspot.com/2010/10/ejercitando-la-derrota.html
Saludos