Ya no eres esa persona que conocí. Me di cuenta hace un instante,
cuando no supe ver que había más allá de tu mirada, que se volvió opaca al
cruzarse con la mía, y mi estómago notó la ausencia de las mariposas que debieron
escaparse en no sé que momento. No te reconozco, aunque quizás soy yo la que ya no sea esa persona que tú conociste.