Coincidían todas las mañanas en el autobús, él rumbo a su trabajo, ella hacia el hospital. Como siempre, acababan en asientos contiguos, pero como siempre, únicamente cruzaban una mirada y una sonrisa. No había más palabras.
Coincidían todas las noches a la misma hora. Como siempre, cada uno en su casa, frente al ordenador, pero como siempre, palabras era lo único que intercambiaban. No había cruce de miradas y sonrisas.
Una noche ella le confesó que comenzaba a sentir algo por él, pero que antes de conocerse debía superar algo. Él compartió el sentimiento.
Una mañana dejaron de coincidir en el autobús.
Bravo!!!, difícil tema que has solucionado con maestría, el mundo en sus dos espacios. Me ha gustado Su.
ResponderEliminarUn abrazo
Para tí, mi fuente inspiradora de hoy.
ResponderEliminarGracias
Pero siguieron coincidiendo por las noches, verdad?
ResponderEliminarMe había hecho una idea de desencuentro, pero el comentario de Anita me pone en duda: muy buen final abierto
ResponderEliminarMe gusta, se lee de un tirón y está bien planteada la historia. Un saludo.
ResponderEliminarAnita, Patrcia, pasa lo que ustedes quieran que suceda. Ya no es mío, sino de ustedes.
ResponderEliminarGracias Alberto
Aprovecho los encuentros y desencuentros para recomendar otra vez esta maravilla de libro ilustrado, Su, con tu permiso.
ResponderEliminarhttp://barbara-fiore.com/index.php/libros-archivos/desencuentros/
Me gusta. Es abierto para que el lector pueda crear sus propias coincidencias.
ResponderEliminarUn beso casual
Eligieron la palabra.
ResponderEliminarGran error.
Un beso Su.
Nos encanta el final. Dejarlo a la interpretación e imaginación del lector es un acierto. Cada uno lo haremos particularmente nuestro.
ResponderEliminarGracias por el regalo.
Besos a pares
Me gusta la concordancia estricta entre tema árido y prosa áspera. Muy bien conseguida la conjunción de fondo y forma.
ResponderEliminarUn abrazo,
PABLO GONZ
Mi querida... Su, ultimamente está usted que se sale. Y mi sombrerero... en las últimas.
ResponderEliminarUn beso desde el futuro.
Gemelas, Odile, Pablogonz, muchísimas gracias por sus comentarios.
ResponderEliminarTorcuato, ¿cómo saber si fue un error o un acierto?
Kum, como siempre, todo un honor recibir tu sombrero. Sabían o sabría?
Besos
Con permiso...
ResponderEliminarSeguro que de noche compartieron más que sonrisas...
Muy interesante
No lo dudo. Gracias por tu visita.
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